Acerca de Suecia
¿Qué se puede hacer en Suecia?
Suecia es un país grande, muy variado geográficamente y sorprendentemente poco conocido, cuyo sentido del espacio se convierte en una de sus mejores cualidades. Fuera del densamente poblado sur, viajar sin ver un alma en la carretera no es poco común.
Estocolmo es la capital de Suecia y la atracción principal; el casco antiguo, conocido como Gamla Stan, es uno de los grandes encantos del país y consiste principalmente en la isla Stadsholmen y un conjunto de islas que acogen una arquitectura monumental, siendo la Catedral de Estocolmo un punto al que conviene asistir junto con el inmenso Palacio de Estocolmo, situado en el mismo centro de la ciudad. En igual medida, la ciudad alberga grandes museos entre los que cabe destacar el museo Vasa, un museo marítimo centrado principalmente en un barco que en su momento fue diseñado como el más grande del mundo, pero que debido a ciertos fallos en el diseño se hundió en la misma ciudad 20 minutos después de haber zarpado.
El centro y el norte de Suecia son los mayores puntos para el turismo debido a las grandes extensiones de bosques, los inagotables lagos - alrededor de 96,000 - y algunas de las mejores rutas de senderismo de toda Europa.
La vida nocturna en la ciudad de Estocolmo es la más atractiva del país, con discotecas y pubs distribuidos por la localidad, entre los cuales puede optar entre discotecas para bailar y beber hasta lugares tan originales como el bar de hielo “Icebar” y otros clubs temáticos como el bar de los vampiros “The Vampire Lounge”.
¿Cómo moverse por Suecia?
Viajar en ferry es la mejor forma de ver las islas y archipiélagos de Suecia. En Direct Ferries dispone de abundantes trayectos en barco desde las islas Aland, Suecia, Dinamarca, Finlandia, Alemania, Rusia, Polonia, Lituania, Estonia, Letonia y Gotland, con multitud de operadoras para que pueda elegir el trayecto que mejor se acomoda a sus gustos al mejor precio.
Dos rutas de tren le pueden unir con la zona sur. La línea de trenes oriental pasa por cerca de la costa de Botnia, por ciudades completamente construidas con madera, ciudades en construcción y puertos de ferry que cuentan con conexiones con Finlandia. En el centro, los trenes de Inlandsbanan (línea del interior) parten hacia las regiones de lagos y montañas, apartando a los renos que pasean por las vías a su paso.
Para moverse por la ciudad, podrá hacer uso de los extensos y fiables servicios de transporte público que se ofrecen. Como alternativa, también tiene taxis disponibles.
¿Cuál es el mejor momento para reservar un ferry a Suecia?
Los meses que se extiende desde mayo hasta septiembre son los que presentan los días más largos con las temperaturas más agradables. En el mes de octubre comienzan las primeras nevadas y los días se acortan, haciendo más incómodo y complicado pasear por la ciudad y visitar sus monumentos, especialmente durante los meses de invierno. Si el frío, la lluvia y la nieve no es un problema, la ciudad y sus monumentos pueden ser visitados durante todo el año.
Acerca de Lituania
A diferencia de sus países vecinos, Lituania disfrutó de un período de independencia. Habiendo ahuyentado a los Hermanos Livonios de la Espada en 1236 en Siauliai, los lituanos emergieron como un estado unificado bajo el Gran Ducado de Lituania (1316-41).
La Unión de Lublin de 1569 estableció un estado polaco-lituano que alcanzó su apogeo bajo el reinado de El Conde Esteban I Báthory de Somlya.
Pero la Gran Guerra del Norte de 1700-21, en la que Polonia-Lituania, Rusia y Suecia lucharon por el control de los países bálticos, dejó el país devastado, y para finales del siglo XVIII, la mayor parte de Lituania había caído en manos rusas.
Varias revueltas en 1830 y 1863 presagiaron un aumento del sentimiento nacional, y el colapso de Rusia en la Segunda Guerra Mundial permitió a los lituanos reestablecer su independencia. En julio de 1940, el país se anexó definitivamente a la URSS.
Cuando Moscú fue relajando gradualmente su postura radical a finales de los años ochenta, las demandas por una mayor autonomía llevaron a la declaración de independencia el 11 de marzo de 1990, mucho antes que en los otros estados bálticos. Una confrontación prolongada que llegó a un momento decisivo el 11 de enero de 1991, cuando las fuerzas soviéticas mataron a catorce personas en la torre de radio y televisión de Vilnius, pero cuando el intento de golpe de estado anti-Gorbachev aconteció en agosto de 1991, el mundo - pronto seguido por la Unión Soviética, que se estaba desintegrando - reconoció la independencia de Lituania.